La infancia y la adolescencia son etapas de gran interés para la nutrición, ya que es la época en la que se crean y consolidan los hábitos alimentarios (HA) que, correctos o no, se mantendrán casi durante toda la vida. Una buena educación nutricional promociona la salud mediante el aprendizaje, adecuación y aceptación de HA saludables, de acuerdo con la propia cultura alimentaria y los conocimientos científicos en materia de nutrición que se tienen hasta el momento.

La educación nutricional se puede realizar desde distintos ámbitos:

• La familia es un buen lugar para ejercerla, dado que el individuo desde que nace comparte la comida con el resto de la familia y existe una relación de proximidad y afecto entre los distintos miembros.
• Los centros escolares son un entorno social fundamental para los niños y los adolescentes, y se han realizado múltiples intentos para utilizarlos en la promoción de conductas saludables en la juventud, incluyendo HA saludables y la práctica de actividad física. En muchos casos los niños realizan el almuerzo en el comedor escolar (la mayor parte de ellos comen en el comedor escolar 5 días por semana, durante 9 meses al año.

Actualmente en España, los conocimientos sobre alimentación y nutrición están cubiertos por varias asignaturas tales como Conocimiento del Medio Rural, Social y Cultural (Educación Primaria), Ciencias de la Naturaleza (Educación Secundaria), y Anatomía Aplicada (Bachillerato); además de estar incluidos en la asignatura de Educación Física en todas las etapas. Sin embargo, en su totalidad representa un porcentaje no muy alto dentro de la educación escolar. Por lo tanto, la educación nutricional debe formar parte fundamental de la educación integral de la población infantil y juvenil, ya sea tratado como contenido transversal o como propio de diversas materias que componen el currículum escolar en España, lo cual supone el esfuerzo de coordinación entre materias, con el objetivo de formar individuos sanos.

Es por ello, que desde el pasado año 2010, la FEN colabora en el proyecto europeo European Food Framework (EFF), coordinado por la Fundación Británica de Nutrición (BNF) y en el que participan otros países europeos pertenecientes a la Red Europea de Fundaciones de Nutrición (Austria, Reino Unido, Alemania, Francia, Países Bajos, Italia, Irlanda, Suecia, Suiza, Bélgica y Portugal).
El EFF es un proyecto europeo, de dos años de duración, que busca mejorar la salud de los niños y los jóvenes en toda Europa, ofreciendo una información actual y precisa  a  todos los involucrados en la alimentación y educación para la salud (www.europeanfoodframework.eu).

El proyecto se inició en febrero de 2010 y continuará hasta junio de 2012. El objetivo principal del proyecto es el desarrollo de un marco que cubra distintas competencias en materia de alimentación y nutrición para los jóvenes en diferentes edades. Este marco incluye conocimientos sobre dieta (alimentos y bebidas), balance energético y estilos de vida activos con una serie de contenidos en materia de nutrición, alimentación y actividad física que se consideran importantes para formar parte del currículum escolar. Podrá ser utilizado en toda Europa como una guía básica para las diversas actividades nacionales o regionales, para llevar a cabo, por ejemplo, el desarrollo de futuros programas escolares.

Además de haber creado el marco en materia de dieta, balance energético y estilos de vida activos, se  han diseñado distintas encuestas on line para los jóvenes de entre 5 y 16 años, las cuales se están usando para valorar los conocimientos de los jóvenes europeos sobre la dieta y los estilos de vida y,  sobre todo, lo que quieren saber acerca de estos temas. La encuesta está dividida en 4 fases, según la edad de los participantes:

• Etapa 1: de 5 a 7 años
• Etapa 2: de 8 a 10 años
• Etapa 3: de 11 a 13 años
• Etapa 4: de 14 a 16 años

Estas encuestas están disponibles en la página web de la Fundación Británica de Nutrición (BNF), con su versión en castellano (http://www.europeanfoodframework.eu/node/78). La duración estimada de realización es de unos 15-20 minutos. La encuesta es anónima y los datos obtenidos se manejan bajo la estricta normativa sobre protección de datos.
No recoge ninguna información personal sobre los jóvenes, sólo pide la opinión de cada escolar sobre una serie de alimentos, el estado de salud y cuestiones sobre la actividad física. Toda la información recopilada está ayudando a dar forma al proyecto, para mejorar la educación alimentaria y nutricional en este grupo de población.

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