Comer de restaurante ya no es sinónimo de comer mal o en exceso, pues cada vez son más los establecimientos de restauración que ofrecen posibilidades adaptadas a nuestros gustos y necesidades y que, además, nos permiten mantener una alimentación sana y equilibrada.
Siguiendo las pautas que propone la Fundación Española del Corazón, desde InfoAlimenta queremos ofrecerte algunos consejos para mantener una alimentación saludable sí decides comer fuera de casa.
1. Internet se ha convertido en nuestra principal fuente de información. La red te ofrece la posibilidad de buscar restaurantes con menús saludables que incluyan alimentos como pescados, carnes magras, verduras y frutas. Trata de ir variando el tipo de platos que eliges a diario para que tu dieta no solo sea saludable, sino también variada y equilibrada. Comer de restaurante te permitirá elegir opciones gastronómicas de cualquier parte del mundo y de cualquier Comunidad Autónoma que se te antoje. La comida japonesa o la vegetariana son dos buenas opciones, pero entre las opciones españolas siempre podrás encontrar un rico plato que incluya vegetales y tenga una preparación sencilla (vapor, plancha, horno…)
2. Si vas a trabajar o conducir, procura evitar las bebidas alcohólicas, y si tienes opción, pide añadir tú mismo la sal al plato.
3. Un truco que puede ser útil es elegir lo que vas a comer antes que el resto de los comensales. Evitarás de este modo la influencia de los demás y dejarte llevar por opciones menos equilibradas desde el punto de vista nutricional.
4. Si comes fuera de casa y tienes que volver a trabajar, no hace falta que pidas tres platos. Una buena opción es compartir los entrantes y los postres y pedirte un plato principal. Erróneamente, los postres suelen tener mala fama, pero no tiene por qué ser así. Existen opciones muy ricas y perfectamente saludables. Si hay fruta o yogur tenlo claro, si no, las infusiones o los cafés siempre dejan un buen sabor de boca.
5. Pregunta si los platos llevan guarnición. Opta preferiblemente por guarniciones vegetales cocinadas sin exceso de grasas. No tienes por qué renunciar a tu guarnición favorita. Basta con que la adaptes a tus necesidades. Si eres muy fan de las patatas, por poner un ejemplo, pruébalas asadas o cocidas en vez de fritas. Existen además opciones para dotar a tus platos de un extra de sabor sin añadirles calorías. El limón y las hierbas aromáticas son una excelente opción.
Recuerda que estas pautas te ayudarán a mantener una dieta equilibrada si habitualmente comes fuera de casa. Como siempre hay excepciones. Un cumpleaños, una fiesta, una salida de fin de semana… Puedes comer de todo, pero no comas todo lo que puedes.
Fuentes:
Informe económico FIAB: http://fiab.es/es/archivos/documentos/INFORME_ECONOMICO_FIAB_2017.pdf
Universidad de Cambridge: https://www.cambridge.org/core/journals/public-health-nutrition/article/whats-on-the-menu-a-review-of-the-energy-and-nutritional-content-of-us-chain-restaurant-menus/B2B9C89AB21F4FDFD867767F0AC5D7CC
Federación española del corazón: https://fundaciondelcorazon.com/prensa/notas-de-prensa/3308-decalogo-para-una-comida-saludable-fuera-del-hogar.html