Tras la época estival damos de nuevo la bienvenida al otoño, que viene cargado de productos de temporada que nos hacen más llevadera la vuelta a la rutina. Disponemos ahora de una gran variedad de alimentos con los que podemos conseguir una dieta sana y equilibrada.
A pesar de que actualmente podamos encontrar toda clase de productos, lo más recomendable es ingerir aquellos que nos proporciona cada estación, ya que conservan sus vitaminas y minerales en sus niveles más altos y nos ayudan a prevenir los síntomas habituales de esta época del año como la astenia.
Según una reciente encuesta realizada por el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO), siete de cada diez españoles aseguran estar más cansados con la llegada del otoño, lo que termina influyendo en la vida laboral, familiar y social. Tal y como se afirma en el estudio, una de las formas de combatir este problema es llevar una dieta equilibrada con la que mejorar nuestro sistema inmunológico.
Por eso, los principales complementos que debemos incluir en nuestra dieta son las vitaminas y minerales, ya que harán que nuestras defensas nos protejan frente a virus y bacterias. Una de las vitaminas más importantes es la C, encontrada principalmente en cítricos y verduras de hoja verde. No debemos olvidarnos tampoco de la vitamina A, la cual la podemos encontrar en alimentos tanto de tipo vegetal como animal, ni de la vitamina B, ingerida a través de legumbres, cereales y verduras de hoja verde.
Son muchos los productos que cumplen estas condiciones con las que tener una alimentación más saludable y adecuada a la época del año en la que nos encontramos. Te damos algunos ejemplos de estos alimentos de temporada:
– La granada, fuente de fibra, potasio, vitamina C, antioxidante y ácido cítrico.
– La calabaza, rica en fibra, aminoácidos y vitaminas A y B, lo que mejora el tránsito intestinal y la visión, entre otros. Además, sus semillas son fuente de grasas y aceites saludables como el omega 3 y el omega 6.
– Las setas nos aportan muchas vitaminas (B, C, K y E) y minerales, especialmente potasio, fósforo y hierro.
Si combinamos una alimentación sana junto con ejercicio físico de manera habitual, nuestro estado anímico será mucho mejor y tendremos una transición hacia el invierno mucho más llevadera.
Fuentes: MICOF