Con la llegada de la primavera, empieza el buen tiempo y los días se hacen más largos, siendo el momento ideal para disfrutar del aire libre y de las actividades en familia. Organizar un picnic en el parque o en la montaña puede convertirse en la excusa perfecta para pasar más tiempo con los niños de una manera divertida, alternando la actividad física a través de juegos o deporte con una alimentación saludable.
Comer fuera de casa no tiene por qué implicar no hacerlo de manera sana; existen múltiples alimentos que son ideales para llevar de excursión. Lo más importante es tener en cuenta que algunos de ellos conservan más tiempo sus propiedades estando fuera de la nevera que otros. Por ello, escoge recetas que puedan mantenerse en buen estado a pesar de no estar totalmente refrigeradas, como los alimentos cocidos o los elaborados con arroz. En el caso de las frutas, opta por llevarlas enteras para que mantengan intacto su valor nutricional. En cuanto a las salsas, lo recomendable es llevarlas en sobres individuales para incorporarlas justo en el momento antes de consumir el plato para evitar fermentaciones.
Para completar un menú equilibrado recomendamos algunas recetas como la quiche de espinacas o de jamón y queso, que permiten su consumo tanto en caliente como en frío. También puedes preparar palitos de verdura o una tortilla de berenjenas y calabacín. Como postre o tentempié, se pueden preparar en el momento brochetas de frutas variadas u optar por los frutos secos, alimentos muy energéticos ideales para reponer fuerzas.
Por último, recuerda transportar los alimentos en envases herméticos y, a poder ser, en bolsas isotérmicas que garanticen una temperatura óptima de los alimentos.
Fuentes:
Guía del niño
Objetivo bienestar